El dia no estaba para muchas fiestas, llegamos desde Cambados hasta Portonovo, que es donde se celebraba, y todo el camino lloviendo sin parar. Pensábamos que no vendría mucha gente, asi que nos tomamos un cafelito mientras esperabamos, y se empezó a animar el ambiente.Llover seguía lloviendo pero por lo menos empezaban a llegar Vespas de todos los colores. Después de los saludos y reencuentros de rigor, todos salieron a completar la ruta. Nosotros hicimos varias paradas para poderles sacar fotos en diferentes lugares.